El Sewelo, es el segundo diamante en bruto más grande de La Tierra. Con una cifra de 1758 quilates, esta maravilla de la naturaleza ha cautivado a muchas personas a lo largo de su corta historia. Descubierto en abril de 2019, esta gema de singular y gran belleza, tiene unos tonos negros que aumentan la magia que desprende una piedra de tal calibre.

Su nombre, traducido al español, significaría el equivalente a una catalogación de “hallazgo raro”. La maison Louis Vuitton, conocida en el mundo entero, sorprendió de nuevo al mundo adquiriendo esta pieza, generando todo tipo de titulares e impacto entre la comunidad. El tamaño de esta gema, no deja indiferente al público. Con un peso superior a los 350 gramos, este diamante tiene un volumen similar al de un puño de adulto cerrado.

La compra de diamantes por Louis Vuitton

No es la primera vez que la emblemática casa Louis Vuitton está presente y se hace notar en la comunidad del diamante. En el pasado dio mucho que hablar con ventas de este tipo de piedras precios. También ha lanzado colecciones completas de joyería de alta gama y de una calidad exquisita basada en la elaboración artesanal.

Con ventas a las espaldas de piezas por más de 18.000€, como brazaletes de joyería fina, actualmente Louis Vuitton se ha consolidado como competencia directa de las joyerías más prestigiosas y consagradas del mundo, dedicadas en exclusiva a este sector. En 2012, podíamos ver como abrían una tienda en la capital de Francia, posicionándose como una empresa a la que debían tener en cuenta tras abrirse paso de manera progresiva.

¿Cuál es el futuro del segundo diamante más grande del mundo?

Como pudimos ver nuestro artículo pasado: ¿Quién tiene los diamantes más grandes del mundo?, la intención de la maison es tallar el diamante para extraer partes del mismo tal y como hizo Eduardo VII con el “Culillan”. Este último considerado el diamante más grande del mundo, seguido por el Sewelo.

Sin duda, estas piezas refinadas que se obtendrán del diamante en bruto, serán consideradas como gemas de alta exclusividad debido a su extrema rareza. El final definitivo sobre los usos de las diferentes por ahora, simplemente son meras conjeturas. La casa “Lucara Diamon”, será la encargada de realizar el proceso de refinamiento del diamante, para segmentarlo en partes independientes.

El destino final de los fragmentos, lo encontraremos en casas de alta cuna, probablemente formando parte de alguna otra obra maestra de la joyería. Probablemente los encontraremos engarzado en alguna pieza real, o incluso en piezas más comunes como collares de joyería fina e incluso pendientes fabricados a mano por las manos más expertas con los mejores materiales del mercado.