Los diamantes son el mejor amigo de una mujer, decía la famosa canción, y no se equivocaba en absoluto. Seas hombre o mujer, un diamante es uno de los regalos más valiosos del mundo que puedes recibir. Su exquisito brillo, sus características de resistencia (por las que hace más de 4.500 años ya los utilizaban en China como herramienta para pulir y afilar hachas) y su dificultad para extraerlo hacen a este mineral muy especial. Y precisamente por su peculiaridad, los precios de diamantes son los más caros del mercado. Pero ¿sabes por qué y cómo se calculan los precios de diamantes?

Los precios de diamantes no son aleatorios. Existen unas listas que son una referencia y un recurso al alcance de los profesionales del sector de la gemología y la joyería. Estas establecen los precios de las piedras según las características propias de cada una (no todos los diamantes valen lo mismo) y la situación del mercado, variando cada semana. ¿En qué se basan a la hora de determinar el precio?

Existen cuatro rasgos que determinan el valor real de un diamante: la talla (si está bien tallado tendrá un brillo y lustre inconfundible), el color (cuanto más incoloro o transparente sea el diamante, mayor sera su valor), la pureza (menos imperfecciones, más valor) y el peso (más peso, más precio).

Analizando estos rasgos de la piedra en cuestión, los expertos consultan las listas de precios, organizadas en forma de tablas con diferentes cuadros según el peso y la forma de talla del diamante, en las que aparecen en negrita los precios que han aumentado y en cursiva los que se han reducido. En la primera línea del cuadro se encuentra, de mayor a menor, el peso, la fecha y la forma del diamante; en la segunda, los grados de pureza; y en la primera columna, la escala de graduación del color. El interesado tendrá que moverse horizontal y verticalmente por los valores de la tabla hasta dar con las características de la piedra en particular, a fin de conocer el precio por quilates.

El vendedor tendrá en cuenta el tipo de comprador que tiene a la hora de establecer el precio (si es mayorista, tallista o detallista). Basándose en la referencia de estas tablas, establecerán el coste orientativo de la piedra preciosa, pero será el propio poseedor el que decida el dinero final en función de las características propias del mineral y el potencial de este.

Conocer cómo se establecen los precios de diamantes nos servirá para saber el valor real y la calidad de la piedra que estamos adquiriendo. No dudes en informarte sobre el coste del diamante y pide el certificado con sus características a la hora de la compra. Recuerda: un diamante es para siempre.